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Hogar

Comprar una vivienda es la mayor inversión que realizamos.

La vivienda propia, es el patrimonio más importante que poseemos las personas. Este bien tan costoso de adquirir, puede perderse en cualquier momento. El hogar está amenazado por multitud de riesgos que pueden dañarlo en distintos grados, llegando incluso, en algunos casos, a su desaparición física o destrucción total con el consiguiente quebranto económico que ello supone.

También debemos plantearnos el daño que podemos provocar a las viviendas vecinas, o incluso a las personas o al mobiliario que se encuentre en la calle. Nos encontraríamos no solamente con los perjuicios en nuestro hogar sino debiendo enfrentarnos al pago de los daños provocados que podrían llegar a provocarnos un grave problema económico al cual enfrentarnos.